Salmos para difuntos
La muerte, aunque es un suceso que no podemos cambiar, aun nos cuesta aceptarla. Pues nadie quiere perder a un ser querido, no lo aceptamos con facilidad. Para ello buscamos consuelo en la palabra del Señor, además de abrirle el camino al cielo a nuestro difunto. Los salmos para difuntos queridos hacen ambas cosas, por lo queremos compartirlos con ustedes.
Además, queremos compartir con ustedes otros contenidos interesantes sobre los salmos y las distintas funciones que ellos pueden desarrollar. Para cada ocasión y momento en la vida podemos utilizar uno o varios salmos para buscar consuelo, confort y respuestas.
Salmos cortos para difuntos
Estos salmos son especialmente dedicados para los difuntos, con su rezo lograremos pedirle a Dios, que reciba en su reino a esta persona que ha fallecido sin importar la razón o el motivo por el que murió.
Con los salmos para fallecidos elevamos una petición a Dios y a los ángeles para que reciban a nuestro difunto en su reino. Estas palabras sagradas sirven también como salmos de consuelo para la pérdida de un ser querido. Entre los salmos cortos para difuntos más recitados se encuentran:
Salmo 18:28
Con este salmo le pediremos a Dios que mantenga encendida la esperanza en nosotros. Que nos ayude a entender y sobre todo a aceptar que esa persona que amamos haya pasado al plano de los cielos.
Además, es una forma de mantener la paz interna, entendiendo que a pesar del dolor que puede generar la pérdida de un ser querido, este se encontrará en un lugar mucho más tranquilo, donde obtendrá espacios de armonía y felicidad eterna.
Salmo 23:4
A través de estas palabras, le pedimos a Dios que acompañe a nuestro ser querido por su trayecto hacia los cielos, que le ilumine y saque de cualquier oscuridad que le quiera retener. De igual manera, le pediremos a Dios que nos acompañe por el camino de la pérdida y que nos permita entender porque nuestro ser amado ha partido en ese momento.
Es una manera de pedirle que nos llene de entendimiento y aceptación para que la pérdida de nuestro ser querido sea menos dolorosa, nos llene de paz y armonía nuestro corazón y espíritu. Para así vivir el duelo de manera tranquila, sin dejarnos agobiar por la perdida y la oscuridad.
Asimismo, haremos que nuestro ser querido se desprenda de este plano terrenal sin cargas ni culpas, dejando libre su alma y espíritu para encontrase con nuestro Señor y disfrute de la vida eterna rodeado de amor.
Salmo 34:18
Con este salmo le pediremos a Dios que fortalezca nuestra alma y nuestro corazón, asimilando que la muerte es un paso en el camino a la vida eterna. Además, con estas sencillas palabras le solicitaremos a Dios que llene de paz y entendimiento a esa persona que está a punto de fallecer.
Pues hay ocasiones en la que ellos piensan que no es el momento de partir, esto puede causarle angustias y hacer ese momento más doloroso e incomprensible de lo que en realidad es. La muerte física es el renacimiento del alma y la llegada al plano celestial junto a nuestro padre creador y todos los seres de luz que lo acompañan.
Salmo 48:14
Este salmo nos habla de Dios y su poder infinito, es por ello que estará con nosotros por los siglos de los siglos, nunca nos abandonará, estará junto a nosotros cuando dejemos el plano terrenal y vayamos a su lado en el plano de los cielos. Siempre nos guiará por el camino correcto, desde que nos da la vida hasta que nos envía al cielo, a su reino eterno.
A los dolientes del difunto les ratifica, que a pesar del mal momento que viven (porque no aceptamos a la muerte como un paso más de la vida) él está junto a nosotros consolándonos y dándonos fuerzas para continuar, para que podamos esperar con paz y tranquilidad en nuestra alma el momento en que nos volvamos a reencontrar con nuestros seres queridos que han partido antes que nosotros.
Salmos 62: 1
La pérdida de un ser querido es un momento difícil y a veces incomprensible (sobre todo cuando es una persona muy joven) que nos cuesta asimilar, sin embargo, cuando confiamos en Dios y sus designios vamos a entender que es su voluntad y no la nuestra la que debe prevalecer.
Sus palabras nos consolarán y nos harán entender porque esa persona debía partir, porque debía regresar al lado de nuestro padre celestial. Dios nunca nos desampara, por lo que él es nuestra única salvación, solo debemos mantener la fe para aceptar este momento y poder continuar nuestra vida.
Teniendo siempre presente que nuestro ser amado no nos ha abandonado, solo está en un plano diferente, acompañándonos y guiándonos por la senda del bien y del amor. Además, mientras estén en nuestros corazones, nuestros difuntos vivirán eternamente junto a nosotros.
Salmos poderosos para difuntos
Los salmos poderosos para difuntos son palabras de aliento para la persona que fallece y para quien lo está despidiendo. Es una forma de solicitar a Dios su bendición y consuelo, para que nuestro difunto llegue al cielo sin novedad y nosotros podamos superar su perdida en paz. Por lo que las recitaciones de los salmos católicos para difuntos son de suma importancia durante el período de duelo.
No todos tenemos la misma fortaleza y la misma capacidad de aceptar las cosas, por lo que a veces la pérdida de un ser querido puede ser un momento difícil y muy angustioso. Por lo cual debemos recitar desde el corazón los salmos de consuelo para la pérdida de un ser querido.
De tal manera que, podamos buscar refugio en los brazos de nuestro padre celestial y confiar en él sin poner objeciones ni hacer juicios, pues él es justo y benevolente, sus designios son siempre para nuestro bien. Algunos de los salmos poderosos para difuntos son:
Salmo 4:1-3
Cuando sentimos que Dios ha sido injusto con nosotros, por quitarnos a nuestro ser querido, debemos pedirle que nos aclare el entendimiento, nos ilumine para entender sus motivos y encontrar con celeridad su enseñanza.
Debemos pedir la liberación de nuestro corazón, dejar las penas a un lado y seguir disfrutando de las bondades de la vida, pues nuestro ser querido no se ha ido, simplemente no podemos verlo a diario, pero él está junto a nosotros solo que de una manera diferente.
Debemos entender que Dios nos ha dado una misión de vida y que cuando la cumplimos, él nos llama de vuelta a su reino. Nuestros seres nunca nos abandonan, pues siempre están dentro de nuestros corazones.
Salmo 6:3-4,8-9
Los seres humanos somos seres perfectamente imperfectos, tenemos grandes virtudes, pero también cometemos grandes errores. Muchas veces nos sentimos angustiados porque creemos que Dios nos ha abandonado y por eso nos ocurren las cosas que experimentamos, incluidas las pérdidas de nuestros seres queridos.
Nuestra alma se agobia y atribula, no conseguimos consuelo en nada y nos desesperamos, rogamos a Dios clemencia, perdón. Es ahí cuando liberamos nuestra alma y corazón de todo lo que hemos hecho y comenzamos a encontrar la tan anhelada paz. Nuestro Señor nos deja recapacitar y reconocer nuestras faltas, para luego darnos su consuelo y amor infinito.
Él es nuestro padre celestial y como tal siempre estará a nuestro lado, dándonos su amor, su bendición y protección, solo debemos aceptar que todo lo que nos sucede es por alguna causa y que a través del tiempo lo descubriremos, cada una de nuestras experiencias significa un aprendizaje. Y cuando descubrimos el motivo de nuestro padre nos sentimos en paz.
Salmo 23:1-4
Este es uno de los salmos más recitados por la humanidad, en él se encierra una gran fuerza y es la mejor demostración de nuestra confianza en Dios. A través de estas frases le ratificamos a nuestro Señor que estamos conscientes de su guía y que aceptamos que todo lo que nos pasa en la vida es parte de sus designios.
Le confirmamos nuestra aceptación y agradecimiento, que no dudamos de su poder y misericordia ni ponemos objeciones a sus actos, sin importar si los entendemos o no en su momento. Pues somos fieles a él y aceptamos todo lo que nos envía tal cual lo hace. Pues sabemos que todo forma parte de nuestro camino por esta existencia y que es el medio para llegar finalmente a su reino.
Salmo 27:1
Nuestro padre celestial es nuestra mayor fuerza, es quien nos protege y cuida de todo mal, como buen padre siempre nos guía por el camino del bien. Él es nuestra piedra angular, en la cual cimentamos toda nuestra vida, nuestros proyectos y nuestras metas.
Cuando tenemos a Dios presente en nuestra vida y nuestro corazón somos invencibles, pues nada nos va a afectar ni nada nos corromperá, sabemos distinguir el bien del mal y siempre vamos actuar bajo sus mandamientos.
Lo que nos permitirá estar a salvo ante cualquier temor, pues sabemos que no estamos ofendiendo ni faltando a nuestro Señor. Él junto a todos los ángeles custodiarán nuestro camino para transitarlo en paz y tranquilidad, bajo la fuerza del amor, la protección y las distintas bendiciones que nuestro padre nos quiera otorgar.
Salmos para lápidas – versículos de la biblia
Los salmos para lápidas, son esas frases que buscamos en la biblia para hacer del descanso eterno de nuestro ser querido un trayecto más luminoso y pleno. Con los salmos católicos para difuntos buscamos guiar a nuestros difuntos a la senda del señor, además de darnos consuelo, pues sabemos que nuestro ser querido se encuentra en el reino de nuestro Señor.
En las sagradas escrituras conseguimos una gran variedad de salmos católicos para difuntos de gran profundidad y sentimiento, los cuales son muy empleados en los epitafios de las lápidas. Algunos de los salmos para lápidas más usados son:
Juan 10: 27-28
Este hermoso versículo de la biblia nos habla de que Dios conoce a cada uno de sus hijos, y cada uno de ellos lo reconocen a él como su padre, su guía. Por lo tanto, él los llevará a la vida eterna donde disfrutarán de toda la dicha que el reino de los cielos puede ofrecer. Ellos estarán junto al padre celestial y nada ni nadie los apartará de ahí, nadie podrá llevárselos a ningún otro lado, pues ellos saben que Dios es su pastor.
Juan 11: 25-26
Con este salmo le mostraremos a Dios que a pesar de todo siempre estará con nosotros, que reconocemos el poder de su mano y que en todo momento aceptaremos las bendiciones y lineamientos que nos han enseñado, además, de aceptar y ratificar que después de esta vida existe otra que será eterna y que estará colmada de bendiciones y de armonía.
Corintios 15:22
Todos los hombres son pecadores por naturaleza, pero Dios no les aparta ni les juzga, simplemente les enseña el camino que han de transitar y la forma en la que deben llevar su vida. Pues el como buen padre sabe que a través del tiempo cambiarán su forma de actuar y lograrán vivir en paz, armonía y bajo sus mandamientos; por lo cual recibirán al final de sus días el pase al reino de los cielos, donde vivirán eternamente. Llenos de amor, luz y armonía, a la espera del reencuentro con sus seres queridos que un transita los caminos de la tierra.
Isaías 41:10
Cuando estemos viviendo el momento del cambio de plano, no debemos temer, pues Dios siempre está con nosotros para consolarnos y hacernos entender su voluntad. Él será nuestra guía, nuestra fortaleza, nos llevará a su reino donde viviremos eternamente.
Por lo cual no debemos temer cuando estemos en ese momento, aunque sintamos que no estamos preparados, nuestro espíritu, nuestro corazón y alma sabrán que es el momento indicado, solo debemos dejarnos guiar por nuestro padre para volver a su encuentro.
Esperamos que este contenido sobre los salmos para difuntos le haya sido de utilidad, pues sabemos que no es fácil la pérdida de un ser querido y que es un momento difícil al cual aún no nos acostumbramos, aun sabiendo que es ley de vida.